Redactar un texto de forma correcta es un proceso que requiere cierta complejidad, mucha precisión y la formación adecuada para llevarlo a cabo. Si bien prácticamente todo el mundo es capaz de elaborar un texto que se comprenda y que transmita un mensaje, en muchas ocasiones se aleja de lo que podemos considerar un texto bien escrito. Incluso en los medios de comunicación actuales podemos encontrar una cantidad elevada de incorrecciones, aun siendo textos de periodistas o personas con la formación adecuada.
En el terreno de la traducción, los textos traducidos deben ser profesionales y correctos, ofreciendo al cliente la calidad que requiere este tipo de servicio. Es por ello que los traductores profesionales ponen toda la atención en cada detalle del texto final que pasa por un proceso de corrección y revisión hasta considerarse como definitivo para la entrega. Pero, ¿qué entendemos por un texto bien escrito? ¿En qué consiste la corrección y la revisión?
La corrección del texto
Muchas veces nos referimos a la corrección del texto incluyendo aspectos que no forman parte estrictamente de este proceso, y obviando otros que sí. Dentro de la corrección de un texto debemos distinguir entre dos tipos, ambos importantes y necesarios para contar con un texto final correcto:
- Corrección ortotipográfica: se trata de un primer paso en el que eliminaremos cualquier error ortográfico o gramatical que observemos. Nos referimos, por ejemplo, a errores propios de ortografía (un acento, una «v» por una «b», etc.); a errores de escritura en los que se ha «colado» una letra incorrecta; o a errores gramaticales, por ejemplo, la concordancia de género o el tiempo verbal.
- Corrección de estilo: en este caso vamos un paso más allá y tratamos de mejorar la expresión, la coherencia y la estructuración del texto para que el mensaje quede más claro para el receptor y se adecue al propósito de lo que se quiere transmitir. Un texto que no tiene faltas no es necesariamente un texto correcto. Para ello, debemos profundizar más en él, observar si su estructura desde el inicio al final es acertada o si permite que el mensaje se vaya desgranando al ritmo que deseamos. No estamos hablando de modificar el propio estilo del autor del documento, sino de cambios más o menos sutiles que casi siempre mejoran la fluidez del texto.
La revisión del texto
Pese a que en muchas ocasiones se confunden los términos, lo cierto es que la corrección del texto debe diferenciarse de la revisión, dado que son procesos diferentes. Mientras que la corrección tiene que ver con el texto original y solo con ese documento, la revisión es la comparación entre un texto original y su traducción a otro idioma. Lo que hacemos durante la revisión es comprobar que el contenido es el mismo en ambos textos, aun cuando la forma, la estructura o la expresión sean distintas, por razones obvias.
El traductor, por lo tanto, debe observar detenidamente que el texto traducido es fiel en cuanto a contenido y mensaje al original, garantizando que se trata de una réplica del primer texto pero en otro idioma. De lo contrario, por ejemplo, un texto legal traducido a otro idioma que no tuviera el mismo contenido que el original podría conllevar problemas importantes para el cliente. Lo mismo ocurriría con otro tipo de documentos, sean legales, editoriales, médicos, científicos, económicos, publicitarios o de cualquier otra índole. En esa revisión radica gran parte de la calidad final del texto que entregaremos.
BBLTranslation pone todo su empeño para garantizar unos procesos de corrección y revisión muy exhaustivos. Prueba de ello es la confianza que han depositado en la agencia clientes de renombre para los que realizamos la corrección de páginas web o documentos originales.
Nuestro proceso de traducción, además, cuenta con un servicio integrado de traducción y revisión en todos los proyectos, para confirmar siempre la fidelidad del texto traducido con el original.
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